En Burdeos nos encontramos con un Ignasi y Biel, catalan y menorquin respectivamente, que venian de hacer la ruta que nosotros comenzariamos al dia siguiente pero en sentido inverso. Les cogimos el relevo y ya de paso nos conocimos parte de la ciudad en su compania , preparamos cena y nos encervezamos un poco para coger fuerzas.
El martes por la manana empezamos a pedalear. Lo cogimos con tantas ganas que llegamos hasta La Roele, 90km mas alla, ruteando por una velo-pista hecha sobre las antiguas vias del ferrocarril, un delicioso y ligero paseo, con parada de descanso en un pueblo friki con personajes medievales de carton asomados a los balcones (en mas de un pueblo hemos visto como reciclan y economizan con la decoracion).
De tarde llegamos al Camping de La Roele a orillas del Garona. Un rio enorme, marron, y discurre por Francia pero nace a los pies del Aneto (yo no lo sabia). Sigue el calor, un precioso atardecer y la compania de David, un muchachin ingles que se dirigia en bici a Poitiers a encontrarse con su familia. Todos tuvimos que hacer grandes esfuerzos por entendernos pero aun asi resulto una tarde entretenida y muy didactica. Cenamos todos juntinos compartiendo lo poco que llevabamos cada uno y todavia no sabemos por que David probo nuestro cous cous de bacon y no quiso comer mas.
Atardecer en Burdeos
Con los compis, encantadores
Ya en ruta
paramos a oler una flor...
y a ver un arbol...
Sauvetrre
Durante unos 15km nos desviamos de la ruta para evitar trafico, y nos vimos inmersas en un mundo de Falcon Crest, enormes extensiones de vinedos y sus enormes castillos...eat the rich!!!
En muchos sitios encuentras monumentos a aquellos que murieron durante la primera guerra mundial, no se les olvida
estoy flipando con los puentes
y los atardeceres